10 ideas para que tu empresa pueda diferenciarse de la competencia

diferenciarse de la competencia

Diferenciarse de la competencia ya es posible con estas 10 ideas

En un mundo en el que el consumidor disfruta de miles de opciones distintas entre las que elegir, saber diferenciarse de la competencia se convierte en algo casi imprescindible. Por supuesto, lo más conveniente es saber distinguirse para bien (¡no empieces a hacer el ganso sólo para que hablen de ti!). Lo bueno es que existen formas de conseguirlo sin necesidad de hacer experimentos de resultado dudoso como vestirse de pollo gigante o salir desnudo a la calle sujetando un cartelón con el logo de tu empresa.

Si quieres que se fijen en ti, debes ser capaz de sorprender y generar emociones positivas. Aquí tienes algunas ideas de cómo lograrlo.

-Busca lugares distintos en los que vender.

¿Nunca has visto cuadros o lámparas a la venta en una cafetería? En ocasiones, algunos productos se comercializan en los lugares más inesperados. Piensa en sitios sorprendentes en los que ofrecer tus productos y en posibles colaboraciones con otros establecimientos. Si conoces el tipo de cliente que los frecuentan pueden surgir sinergias de lo más interesantes.

-Cobra sólo por lo que se consuma.

En determinados productos y con demasiada frecuencia, lo que se vende es amplio o complejo y el usuario no lo utiliza en su totalidad. Busca la posibilidad de compartimentar los servicios o productos que ofreces, ofreciendo mejores precios y que el cliente decida si quiere pagar más para acceder a servicios adicionales.

-Encuentra tus propios valores.

¿Cuáles son las propiedades con las que podrías identificar a tu empresa? ¿Sois un negocio serio, que sabe cumplir sus compromisos? ¿Sois un negocio divertido, que te entretiene al tiempo que ofrece un buen servicio? ¿Os sentís identificados con determinados valores morales o sociales, como la ecología? Identifica cuáles son las cualidades positivas que definen a tu empresa y transmíteselo a tus clientes. Hay muchas formas de hacerlo, desde crear eslóganes hasta hacérselo saber a los usuarios a través de los departamentos comerciales o de atención al cliente. Eso sí, recuerda ser sincero, que sean valores que de verdad os definan y con los que sois coherentes en vuestra forma de actuar.

-Deja que tus clientes prueben tus productos o servicios antes de comprarlos.

Hay miles de formas de hacerlo, tanto ofreciéndolos directamente para su consumo, como incluyéndolos dentro de una oferta más grande. Permitir que tus clientes prueben tus productos antes de comprarlos será una manera de demostrar que lo que ofreces vale la pena y de generar un vínculo del cliente con tus productos. Hoy en día, es una técnica que se utiliza con cierta frecuencia, e incluso existe un modelo de negocio, el freemium en el que gran parte del producto se ofrece de forma gratuita con la esperanza de que los usuarios contraten después servicios de valor añadido.

-Genera emociones en tus clientes.

¿Conoces el marketing emocional? Si eres capaz de vincular sentimentalmente a tus clientes con tu empresa, tendrás mucho terreno ganado a la competencia. Hay muchos modos de conseguirlo, por ejemplo a través de la publicidad (todos conocemos algún anuncio de algún perrito cojo o similar que nos ha puesto la lágrima al filo del ojo). Una forma muy natural de lograrlo es a través de una atención al cliente profesional, pero también humana.

-Especialízate.

Es una de las formas más funcionales de diferenciarse de los demás. ¿Tu empresa organiza eventos? ¿Y si vas un poco más allá y organizas eventos temáticos, por ejemplo basados en películas que todo el mundo conozca? Para cada campo, hay distintas formas de especializarse. En algunos sectores, en los que la rivalidad sea atroz, puede ser la única forma de llegar a buen puerto y no naufragar en un océano lleno de competidores.

-Conviértete en un experto.

Supone llevar la especialización un paso más allá. Si eres un maestro en tu campo, podrás ofrecer a tus clientes valores añadidos que los demás no podrán proporcionarles. En determinadas áreas, esto puede suponer la diferencia entre el éxito y el fracaso. ¿A qué esperas para seguir aprendiendo?

-Ofrece una imagen distinta de la de los demás.

Estudia bien cuál es la imagen que transmite tu competencia. Tal vez ya existan demasiadas empresas ofreciendo una imagen seria en el sector, y se necesita algo más de desenfado. O puede que la tendencia sea la contraria y haga falta un negocio que transmita más profesionalidad. Estudia lo que se está usando demasiado en términos de imagen de marca en tu sector y busca cómo aprovecharlo, ofreciendo algo distinto. Eso sí, actúa con coherencia y sentido común. Convertir una empresa funeraria en una fiesta con payasos y trapecistas puede ser demasiado arriesgado…

-Ofrece una atención al cliente excelente.

Demasiadas empresas olvidan que el cliente sigue vivo después de venderle sus productos. No seas como el resto. Una gran atención al cliente no sólo conseguirá que tus usuarios sigan contigo durante más tiempo, sino que será un factor que te diferencie de la competencia y del que tus clientes hablarán a sus familiares, amigos y conocidos, con la publicidad positiva que eso supone.

Por cierto, recuerda que para mejorar la atención al usuario existen herramientas tecnológicas que pueden serte de ayuda. ¿Quieres conocer Integria IMS? Entra en nuestra página web y conoce todas las ventajas que puede proporcionar a tu empresa.

-Sorprende a tus clientes.

Hay muchas formas de hacerlo, y no siempre supondrán una gran inversión económica (a ti te toca hacer los números…). Desde remitirles algún regalo promocional junto con sus pedidos, hasta enviarles una felicitación de cumpleaños. La clave es darles más de lo que esperan. Si lo haces, la sensación que tengan tus clientes será muy grata. Existen miles de detalles que puedes tener con ellos, les llamarán la atención y les conectarán emocionalmente con tu empresa.

Estas son sólo algunas ideas para diferenciarte de la competencia y que tus clientes entiendan que no eres como los demás, pero seguro que tú tienes muchas más. ¿Quieres compartirlas con nosotros? ¿Y si nos cuentas cómo te fue cuando las pusiste en práctica? Tienes una caja en la que dejar tus comentarios justo aquí debajo. ¡Muchas gracias!