¡Perder clientes! 7 errores frecuentes que te harán decirles adiós
Es así, los errores forman parte de la vida.
Pero eso no significa que no puedas intentar evitarlos. Y para intentar evitarlos, nada mejor que conocerlos. ¿Ves qué lógico y qué razonable todo? ¡Así da gusto!
Ahora bien, no podemos intentar prever todos los errores que podrías cometer en tu negocio, ni siquiera aunque lo acotemos a la peliaguda cuestión de perder clientes. Pero sí podemos conocer algunos de los errores más habituales. ¡Vamos allá!
7 errores que te harán perder clientes
-Tus productos o servicios no son de calidad
¿Tu camisas se deshacen al segundo lavado? ¿Tus peines no paran de provocar tirones de pelo? ¿Tus chicles sabor frambuesa recuerdan en realidad a una extraña mezcla entre las fresas y el agua de lavado? ¿Y todavía esperas tener algún cliente?
Es una cuestión de base. Si lo que ofreces no tiene una buena calidad, tus clientes durarán contigo menos que un polo de limón en el desierto. Tu verás…
-No contar con un equipo profesional
Vale, es tu cuñado. Vale, es su hermano y tu marido le aprecia mucho. Vale, hace una tortilla de patatas estupenda. ¡Pero es que va a trabajar en shorts y tira globos de agua desde la ventana a los clientes que le caen mal!
Contar con un equipo que esté a la altura es una de las claves para cualquier negocio. Si descuidas la selección de personal o si no cuidas a tu gente, tus clientes terminarán sufriéndolo. ¿Es eso lo que quieres? Ponte las pilas, cuenta con un equipo profesional, trátalo bien y estarás evitando una importante vía de agua en tu empresa.
-No cumplir con las expectativas
¿Publicitas tu crema para las arrugas prometiendo a tus potenciales clientes que aparentarán 20 años menos, ligarán 10 veces más y les llamarán de una productora de Hollywood para protagonizar películas de superhéroes? ¿No te estás pasando un poco?
Mal vas por este camino… Además de ser ilegal, el engaño es contraproducente. A un nivel más bajo, sin llegar a extremos como el del anterior ejemplo, tampoco prometas a tus clientes lo que de verdad no puedas ofrecerles. Por ejemplo, si no puedes tener listo un pedido a tiempo, no asegures poder hacerlo. De lo contrario, tus clientes se sentirán defraudados y no volverán a confiar en ti. Si actúas así, será como estar enseñándoles la puerta de salida.
-Mantenerte demasiado distante con tus clientes
¿Ocultas tus datos de contacto en tu página web bajo 45 subpáginas? ¿Sólo facilitas un teléfono de contacto y has puesto a un loro para atenderlo? Vale, Perico es un lorito muy simpático y conoce algunas palabras, pero igual no debería ser esa su función.
Tratar a tus clientes con disponibilidad, profesionalidad y educación es un valor imprescindible. Por el contrario, si perciben que no te importan o que les estás evitando, es probable que no quieran saber nada de tu negocio.
-Quedarte anclado en el pasado
¿Tu fábrica de menhires ya no recibe tantos pedidos como antaño? Igual es que se han pasado de moda…
El mercado actual se mueve como el rayo, y si no estás al tanto de las novedades, es probable que te quedes atrás. Observa a tu competencia y pregunta a tus clientes. Estudia el mercado y piensa en cómo podrías lanzar nuevos productos o actualizar los actuales. Eso no significa que debas abandonar lo que sigue funcionándote bien, pero sí que debes estar atento y reaccionar cuando sea necesario. De lo contrario, es posible que te abandonen por opciones más adaptadas a las nuevas circunstancias.
-Tener una mala imagen
Tal vez no debería ser así, pero hoy en día la imagen es importantísima para casi todo. Y los negocios no son una excepción.
Y además, en los tiempos que corren, la gestión de la imagen de una empresa no es cosa sencilla. El poder comunicador de Internet lo amplifica todo, y hace que la experiencia de cualquier cliente con una empresa pueda convertirse en un fenómeno viral. Por eso, preocuparse por todos los aspectos de la empresa, y en especial por algunos servicios clave relacionados con los usuarios -como la atención al cliente- se torna esencial para mantener una buena imagen. Y esto nos lleva al siguiente punto.
-Ofrecer una atención al cliente deficiente
Es cuestión de imagen, pero también de eficiencia. Y de fiabilidad. Y de satisfacción. Y de muchos más aspectos que determinarán que un gran número de usuarios se queden contigo o, por el contrario, te abandonen para siempre.
Y es que una mala atención al cliente puede ser un enorme agujero en tu empresa por el que salgan cientos de usuarios.
Cuando un usuario contacta con atención al cliente, habitualmente lo hará porque tenga algún problema con tus productos o servicios, o alguna cuestión importante que tratar. Una deficiente resolución de las incidencias no sólo causará una malísima impresión en tus usuarios, sino que podría provocar su pérdida como clientes, e incluso generar una publicidad negativa que podría ser muy nociva.
Por el contrario, una buena atención al cliente transmite profesionalidad y fiabilidad. Contribuye a la fidelización de usuarios y supone una estupenda fuente publicitaria indirecta, a través de todos tus clientes satisfechos.
Ahora bien, ofrecer una buena atención al cliente no es tarea fácil. Pero, por suerte, existen algunas herramientas tecnológicas, como los sistemas de gestión de incidencias, capaces de hacerte esta labor un poco más sencilla. ¿Nos dejas presentarte el nuestro? Se trata de Integria IMS.
Integria IMS es un programa que dispone, entre otras funcionalidades, de un sistema de gestión de incidencias (software de help desk) basado en tickets (ticketing) que puede resultar muy útil en la gestión de la atención al cliente en empresas u organizaciones.
¿Quieres conocer mejor qué es lo que la herramienta de ticketing de Integria IMS puede ofrecerte? Entra aquí: https://integriaims.com/producto/gestion-de-incidencias/
O también puedes enviar cualquier consulta que tengas acerca de Integria IMS. Hazlo de una manera muy sencilla, gracias al formulario de contacto que se encuentra en la siguiente dirección: https://integriaims.com/compania/contacto/
¡El equipazo de Integria IMS estará encantado de atenderte!